lunes, 21 de abril de 2008

FRAILECILLO DE MIRADA PROFUNDA


Tantas cosas deseo decirte, Juan...
Pero no sé como hacerlo.
Me aquieto, reflexiono...
No es fácil hablar con una persona como tú...
¿Donde estás, Amado?
Ah,,,¿Recuerdas esta frase?
Frailecillo de talla pequeña pero inmenso corazón, cuanto querría parecerme a ti.
Desde mi humildad, yo también abro mis sentimientos, mis dudas, a tu Maestro que es el mío, y le pido evolucionar como persona, igual que supongo que tú hiciste.
Sino...¿qué sentido tiene la vida?
¿ Quizá debo amar más, me dices?
Frailecillo de mirada profunda...¡llévame contigo!
¡No me dejes sóla!
Permíteme comprender algo de tu sabiduría.
¡Oh! ¡Qué me pasa! Las palabras se agostan, mis sentidos se retraen...
Veo Luz...
¿Quienes son ésos?
El resplandor me ciega...
¿Estás ahí, Amado?